Yo desde luego no

Mis músculos empiezan a doler, aunque duerma más de lo necesario.
Parece mentira que todo sea tan cíclico, cuando parece que una tiene superadas ciertas cosas y vuelve a encontrarse ante las mismas problemáticas que hace ya muchos años...
como si el tiempo no pasara o como si de repente uno viera surcado su rostro con arrugas sólo visibles a los propios ojos del alma, los que ven todo lo que se encuentra dentro, aquello que cada vez cuesta más decir.
Quizá porque no se sepa decir.
No es que me encuentre triste, ni siquiera me invade la melancolía, tan recurrente durante mucho tiempo, no, ya no se trata de eso, ahora ni siquiera puedo describir lo que me pasa...quizá no haya palabras, quizá tan sólo el pensamiento no pervertido de artículos, pronombres personales y demás, pueda traducir el sentimiento.
Ni bien ni mal, ni frío ni caliente, ni grande ni pequeño...se escapa a todo porque no tiene nombre ni rostro, ni NADA.
Vuelvo al Yo, Mi , Me , Conmigo...vuelvo, aunque no quiera, inevitablemente a plantearme cada segundo porque esto no sabe a nada.
A pedirle la sal al vecino, a ponerle remedio, a intentar meditar qué sucede aquí dentro...o quizá el problema esté fuera...
Quien sabe.
Yo desde luego no
El caso esque sonrío.
No esque esté triste no...esque me aburro...me aburren...¿nadie quiere emociones?